Esta semana hemos dedicado algo de tiempo a probar Heroes of the Banner, el nuevo juego gratuito para navegador del género Tower Defense de R2Games. El juego está inspirado en la mitología Nórdica, y en el lucharemos junto a deidades del Valhalla contra los ejércitos de demonios y orcos de Loki. El juego cuenta con un interesante estilo gráfico que mezcla una estética retro pixel, con personajes ilustrados con un estilo cartoon.
Para aquellos que no estén familiarizados con el género, la premisa básica es que nos enfrentaremos a oleadas de enemigos que se irán acercando a nuestras bases a través de caminos preestablecidos, y si un número suficientemente grande de atacantes consigue alcanzar nuestra aldea fallaremos el nivel. Para frenarlos tendremos que construir torres que atacarán automáticamente a los enemigos que se acerquen a su alcance, y usar poderosos hechizos que hacen muchos daños en el área seleccionada.
Como su nombre sugiere, las mayorías de las mecánicas del juego se centran en los héroes, como por ejemplo el tener que reclutarlos en tabernas usando pergaminos de invocación, (cuanto más nivel tenga el pergamino más posible será invocar héroes de mayor rareza. Cuando los héroes aparecen en la taberna poseen atributos y habilidades aleatorias, por lo que si uno de estos héroes es del agrado de los jugadores pueden reclutarlos como parte de su equipo.
En cada mapa hay varias localizaciones donde poner torres, en las que pondremos colocar nuestros héroes; cada héroe construye su propio tipo de torre, que es efectiva contra unos enemigos, pero débil ante otros. Además de las torres, que atacarán a los enemigos automáticamente, tenemos habilidades mágicas muy poderosas, que cuestan maná, y que se regenera lentamente hace que esté limitada.
Cada tipo de enemigo tiene distintos atributos, y algunos de ellos pueden ser inmunes a ciertas torres, por lo que combinar las distintas torres es vital para sobrevivir y completar los niveles. Los principales problemas del juego, al menos para nosotros, son dos. En primer lugar, la traducción, que es terrible, cosa que en un juego moderno no es aceptable, ya que lo mínimo que pueden ofrecer los jugadores es una traducción correcta.
El segundo gran problema es que una vez comenzada las batallas, lo único que podemos hacer es lanzar hechizos, lo cual está limitado, las partidas se deciden antes de comenzar, asignando héroes, colocando torres y mejorándolas. Una vez que la partida comienza no podemos recolocar torres, mejorarlas o cambiarlas, lo único que podemos hacer es rezar para que la combinación de torres pueda sea lo suficientemente buena como para frenar a los atacantes y conseguir para al siguiente nivel. Hay otros problemas menos molestos, como que maximizar la ventana no maximiza la pantalla del juego, sencillamente la centra, lo que combinado con la pobre calidad de sonido, y los nefastos efectos de sonido empeoran la experiencia de juego.
El juego no pinta mal, y las opciones de personalización son muy variadas, pudiendo personalizar a nuestros héroes, proporcionándoles equipo y mejorando las torres. Cuando los jugadores derroten a enemigos especialmente poderosos conseguirán recompensas adicionales que podrán dar a sus héroes, y cuando superen niveles conseguirán oro que podrán gastar para mejorar las torres o subir de nivel a nuestros héroes.
