Si habéis estado en el mundillo de los juegos online desde 1996, es probable que recordéis Mplayer.com, una comunidad donde jugadores de PC de todo el mundo se comunicaban, y usaban de enlace para jugar a los juegos de la época. Esta comunidad llego a tener en su momento más álgido 20 millones de usuarios, momento en la que fue comprada por GameSpy. Yo comencé mis aventuras en el mundillo de los juegos a través de Internet con Ultima Online, y poco más adelante con Aliens vs Predator, cuya comunidad habitaba en Mplayer, lo cual me permitió conocer a otros jugadores aficionados a estos títulos, crear nuestros clanes, tener nuestras propias salas de chat, y crear mi propia identidad online. Y también es cierto que pasaba más tiempo navegando por las distintas salas de chat, que jugando a juego. El sistema de Mplayer era sencillo a la par que eficaz, y hacia lo que tenía que hacer, permitir que los jugadores se comunicasen y conociesen a otros jugadores, mientras se lo pasaban bien.
Y digo todo esto, ya que al probar Club Cooee, he podido ver cómo han evolucionado las salas de chat online, ya que juego es básicamente eso, salas de chat online 3D e interactivas. Aunque no estamos ante un juego el sí, el título cuenta con algunas características habituales en juego, como el poder crear nuestro propio avatar, nuestras propias salas y personalizarlas a nuestro antojo.
Lo primero que tenemos que hacer al entrar al juego es crearnos un avatar, cuya apariencia podremos personalizar a nuestro antojo con distintos tipos de peinados, rasgos faciales y detalles físicos (los avatares del juego recuerdan un poco a los Mii de la Wii). Gracias a la cantidad de opciones disponibles, puedes conseguir que el avatar se parezca a tu yo real o hacer que sea un personaje completamente inventado, con el aspecto más alocado que se nos ocurra. Cuando ya tenemos el aspecto de nuestro personaje, tenemos que vestirlo, aunque inicialmente la selección de ropa y accesorios es bastante limitada, aunque con un breve vistazo a la tienda es posible ver la enorme variedad de gorros, sombreros, coronas, chaquetas, guantes, botas, vestidos, alas, rosas, etc… disponibles. La mayor parte de objetos de la tienda pueden comprarse con dinero del juego, aunque hay algunos, los más espectaculares que únicamente pueden comprarse con moneda Premium (de pago) o si tenemos una membresía VIP.
Tras crear y personalizar el aspecto de nuestro avatar, descubrimos que en el juego hay tres tipos de salas: las Salas Estándar (básicamente las creadas por los jugadores), las Salas DJ y las Salas Quiz. Dentro del juego podemos ver un listado de las salas a las que podemos acceder, pudiendo ver información adicional, como cuantos jugadores hay dentro de ellas, si hay algún código de etiqueta (como podemos pasearnos en ropa interior por donde queramos, es normal que haya estas opciones), o el idioma de la sala (aunque generalmente todo el mundo entiende y habla en inglés).
La primera sala que visitamos fue una Sala DJ, una sala con una o más mesas de mezclas y grandes pantallas con las que podemos interactuar. Podemos subir música desde nuestro ordenador para que se reproduzcan en las salas, o buscar videos de youtube para que se reproduzcan en las pantallas de la sala.
Cada sala no tiene paredes, es un espacio que flota en una colorida zona vacía, y dentro de las salas podemos hablar con otros avatares, usar los emotes que hemos adquirido para hacer que nuestro avatar se luzca con movimientos de baile, gestos o acciones. Las conversaciones entre los jugadores son de lo más variadas, la gente es generalmente bastante educada y te saluda al entrar, y puedes tener desde conversaciones banales a discusiones de lo más interesantes. Los moderadores dan cierta manga ancha, y no son demasiado estrictos, por lo que si la gente no se pasa de la raya es posible ver tacos sin que baneen al que los suelta.
Fuimos saltando de sala en sala, y pudimos ver todo tipo de zonas, unas más impresionantes que otras, aunque a nosotros nos llamó especialmente la atención una sala con jaulas, barras de stripper y demás parafernalia, en la que lo único que faltaba para que fuese una sala de estriptis eran las strippers. En esa sala en especial me sucedió algo divertido, y es que al entrar no me fije que había un código de etiqueta, y me recibieron con un “¡El stripper ha llegado!”, tras lo cual me instaron a meterme en una de las jaulas y bailar en ropa interior mientras que el DJ tocaba canciones de Disney. Surreal, y no puedo negar que muy divertido.
Las salas Quiz son salas en las que podremos poner a prueba nuestra capacidad intelectual. En estas salas los jugadores pueden subirse a unos podios y responder preguntar aleatorias de conocimientos generales, y al hacerlo correctamente conseguirán experiencia y dinero del juego. Como jugador sin cuenta VIP, fuimos expulsados de nuestro podio tras responder a unas cuantas preguntas correctamente, aunque esto no es un problema, ya que podemos subir a otros podios, o ir a otras salas. Estas salas no tienen mucho más, hay unos cuantos asientos para la audiencia, y a menos de se celebre algún concurso estas salas son bastante silenciosas, y la gente se centra en responder a las preguntas.
Para terminar de probar todas las opciones posibles del juego, decidimos crear nuestra propia sala, que podemos hacer que sea privada o pública, lo cual significa que mucha gente irá entrando en tu sala. Al ir jugando y subir de nivel, desbloquearemos todo tipo de objetos que podremos colocar en nuestras salas, desde muebles, objetos decorativos y accesorios, a puertas que lleven a otras salas y localizaciones. Tenemos bastantes herramientas que nos permiten recolocar y hacer rotar los objetos para que se ajusten lo mejor posible a lo que queremos conseguir. En nuestro caso, decidimos hacer algo malvado, pusimos unas puertas oxidadas de lo más siniestras y decoraciones oscuras para darle un aspecto tétrico. Esperamos a que algún incauto entrase en nuestra sala, y cuando ya tuvimos a nuestra victima nos pusimos pegados a él sin decirle nada, mirándolo fijamente; salió corriendo de nuestra sala casi al instante. Y como nos reímos.
La experiencia que ofrece Club Cooee es muy interesante, y la recomendamos encarecidamente a toda aquella gente a la que le gusta las salas de chat, ya que les encantará crear su propia identidad y decorar sus propias salas. Si algo así hubiese existido cuando pasaba horas y horas en Mplayer.com, no dudo de que me habría pasado dentro grandes ratos, hablando, haciendo travesuras y conociendo a gente.
