Hemos podido jugar a Panzar, un nuevo MMO de acción de fantasía, que nos ha sorprendido gratamente al ofrecer una experiencia distinta a MOBAs como League of Legends, DOTA o Heroes of Newerth. Tras probarlo exhaustivamente os ofrecemos nuestras impresiones.
Con todos los juegos MOBA que han llegado últimamente, se puede decir estamos en una época muy exitosa para el género; muchas veces son sólo clones de otros juegos pero de vez en cuando aparece uno con la intención de innovar, y es un soplo de aire fresco. La última incorporación del género se llama Panzar, y viene de Rusia.
Primeros pasos
Al entrar al juego tendrás que elegir tu primer personaje. Decimos “elegir” ya que, como en los MOBA típicos, hay varios personajes seleccionables sin la posibilidad de crear uno propio. Ahora mismo los campeones disponibles son: Tank, Paladin, Sapper, Sister of Fire, Inquisitor, Berserker, Ice Witch y Gunner. Ya en la pantalla de selección de personaje verás el estilo visual del juego, que destaca por ser brutal y oscuro, recordando a la estética del mundo Warhammer. Los orcos son temibles y feos, los enanos son toscos y nada sexys, y la sangre es común como el agua. Si buscas un juego con personajes bonitos de ojos grandes y objetos brillantes, Panzar no es lo que buscas.
Para empezar nuestra aventura elegimos ser un Inquisitor, un asesino equipado con 2 armas, especializado en hacer daño y que posee como habilidad inicial la capacidad de hacerse invisible. Como podéis ver en Panzar tenéis que elegir a vuestro personaje (puedes tener varios personajes) antes de empezar el juego, y no hay pantalla de selección de personaje antes de cada partida. Esto se debe a que Panzar se distingue de los juegos de su género, ya que posee progresión de personajes permanente de estilo RPG. En lugar de subir de nivel y equiparte durante las partidas, tu personaje ganará puntos de experiencia, dinero y recursos tras cada partida y los podrás invertir para comprar o crear nuevos objetos u obtener nuevas habilidades como en los MMORPG. Después de la creación del personaje, el juego te llevará a la pantalla principal del juego, que es bastante estándar e intuitiva. Además de las típicas opciones de la tienda y las opciones Premium, el menú cuenta con otras opciones: Character, Forge, Shop, Altar, Fitting Room y Social. En la pantalla de selección de personaje podrás ver tu personaje, en la forja podrás mejorar tu equipo, y con las recetas adecuadas, crear objetos como pociones y equipo, en la tienda podrás comprar objetos nuevos y en el altar podrás desbloquear nuevas habilidad y entrenar a tu personaje, mientras que en el probador puedes personalizar el aspecto de tu personaje, con nuevos tintes, cortes de pelo, etc., y la opción Social puedes gestionar tu lista de amigos, tu clan y estar al día de los torneos.
Lo extraño es la forma que hay de entrar al juego, ya que tienes el típico botón enorme “play” en medio de la pantalla, que te pondrá a la cola para una partida al azar, y eso es todo. Ahora mismo, no puedes elegir ni mapa, ni modo de juego, y esto es bastante molesto para un juego con torneos y que posiblemente espera convertirse en un e-sport en el futuro.
Gráficos y sonido
No tenemos ninguna queja de la estética y los gráficos del juego. Nada más entrar al juego podrás ver los espectaculares gráficos, conseguidos con el motor gráfico CryEngine 3, que nos deleita con espectaculares modelos 3D y efectos especiales e impresionantes animaciones y sombras. Es un verdadero placer mirar al agua, a los efectos visuales, y al excelente uso de la física. Sin duda alguna estamos hablando de un juego muy por encima de la media de los juegos free-to-play.
El estilo grafico de los mapas también es algo digno de mencionar. Con la excepción de la arena de estilo coliseo, que es algo aburrida, el montón de mapas que ofrece el juego están muy bien realizados y son únicos cuando hablamos de gráficos. Un aspecto negativo es que la mayoría de ellos son muy pequeños y habríamos agradecido una mayor variedad de diseños de niveles.
Los efectos de sonido también son destacables, pero nada impresionante, pero hace su trabajo más que bien, capturando las sensaciones que debe dar un campo de batalla, en los que oirás como el metal choca, y como los contrincantes gritan de rabia o de dolor.
El juego
Esta es la parte que hace el juego completamente único y que es diferente del típico MOBA. Panzar es jugado con una perspectiva por encima del hombre en tercera persona, muy similar a los vistos en los TPS y en varios MMORPG como RaiderZ o TERA. El sistema de combate está completamente orientado al combate de acción y es muy sencillo e intuitivo. Usa los controles típicos de los TPS, el combo WASD + ratón con los que tendrás control absoluto de tu personaje. A medida que avances irás desbloqueando habilidades que podrás asignar a teclas numéricas, como en un MMO normal. La verdad es que es sencillo habituarse al sistema si has jugado a algún MMORPG de acción o un TPS. El sistema es sencillo y adictivo, y en combate tendrás que reaccionar rápido y estar muy atento a como se mueven tus oponentes y tus aliados para coordinar los ataques y salir victoriosos.
La partida clásica de Panzar consiste en capturar un punto de control en el centro del mapa. Los mapas no son demasiado grandes, por lo que es habitual que haya grandes batallas en el centro del mapa. También tienen distintas alturas, pasadizos, puntos de cobertura que te permitirás jugar con estilos y estrategias distintas. En los mapas más grandes, habrá herramientas, trampas y artilugios que te darán ventaja en el campo de batalla.
Utilizando un inquisidor nos dimos cuenta que teníamos que jugar de un modo específico para salir victoriosos. Cargar hacia la lucha cuando te enfrentas a Berserkers y Tanques acabará seguramente con una derrota casi segura. Tuvimos que aprender a usar nuestro rol, y como sacarle ventaja en combate aprovechando nuestros puntos fuertes, en nuestro caso, usando el sigilo y situándonos a la espalda de los hechiceros enemigos para eliminarlos rápidamente.
Esto nos hizo ver que cada personaje tiene que ser jugado de un modo distinto y tienen un rol único en los equipos. Como en cualquier MOBA, colaborar con otros jugadores es extremadamente importante para ganar la partida.
Conclusiones
Panzar es un título a medias entre el clásico MOBA y un TPS, que además cuenta con una progresión MMORPG clásica. Los gráficos del juego con espectaculares, pero en algunos aspectos notamos que le falta algo. No hay muchos personajes para un juego MOBA, y cada uno se tiene que subir de nivel individualmente, por lo que si te aburres y quieres jugar con otro, deberás empezar desde el principio. Además no hay modo de crear una partida personalizada, en la que podamos elegir mapa, límite de jugadores o cualquier otra opción. La mejor parte de las partidas es que son rápidas y muy entretenidas, y el sistema de combate es muy adictivo. Si buscas un juego divertido, incluso en cortos espacios de tiempo, Panzar es una gran opción; no esperes el juego PvP del año, pero los desarrolladores están constantemente haciendo cambios y mejoras al juego para que sea cada vez mejor.
Análisis: Panzar
7
Valoración
Gráficos:
9/10
Juego:
7/10
Sonido:
6/10
Divertido y adictivo | Estilo único | Combate de acción basado en habilidades
No puedes elegir mapa o modo de juego | Tienes que subir de nivel a cada personaje