Hoy os traemos nuestro análisis del MMORTS gratuito para navegador de Plarium, Soldiers Inc, un juego centrado en la adquisición de recursos, la construcción de bases militares y en ofrecer contenidos PvP. Como recientemente hemos podido jugar a Total Domination, otro juego de la compañía estábamos interesados en ver en que de diferenciaban ya que ambos son del mismo género. Para este análisis hemos jugado al juego unas cuantas horas, lo que nos ha permitido ver sus contenidos iniciales, aunque no hemos podido jugar lo suficiente como para probar los contenidos de nivel máximo. Comencemos.
La primera impresión al entrar al juego es que para ser un MMO para navegador sus gráficos no son malos, con edificios y unidades detallados, aunque nada espectacular, y una interfaz sencilla que no apelotona los menús y por la cual es fácil navegar. El sonido y la música están bien, aunque nos llamó la intención de que nuestro guía por el juego Mr. Black tenía voz, y no estaba mal hecho, aunque constantemente va soltando chistes, cosa que acaba cansando y que al final provocó que le quitásemos el sonido.
En el juego lo que principalmente haremos es acumular recursos, construir edificios, entrenar unidades y desbloquear tecnologías (en este caso contratos) que nos darán acceso nuevos edificios y unidades; una vez hemos reunido un ejército nos dedicaremos a atacar a la facción controlada por la IA o a otros jugadores. Una cosa que no nos gustó demasiado es que el juego nos guía en todo momento en lo que tenemos que hacer, lo cual inicialmente no es malo, cuando estas aprendiendo el funcionamiento de los distintos sistemas y mecánicas, pero que se vuelve molesto, ya que te ves obligado a completar las misiones en el orden que te las asignas, ya que no hacerlas implica que pierdes unos recursos muy valiosos que necesitas para progresar. Al cabo de un rato esto se vuelve muy aburrido, ya que tener que seguir un camino tan marcado sobre lo que hacer no permite que puedas disfrutar del juego o que puedas hacer lo que te apetezca.
Un punto que está muy bien hecho es el posicionamiento de los nuevos jugadores, ya que siempre comienzan en la periferia de un círculo creciente, lo cual hace que los jugadores con más tiempo en el juego estén en el centro del mapa, y los jugadores novatos siempre están lejos de ellos, rodeados únicamente por otros jugadores novatos. Esto significa que inicialmente no te encontrarás con jugadores que sean mucho más poderosos que tú, aunque también limita que podamos atacar a otros jugadores, que poseen una barrera protectora que dura tres días o hasta que alcanzan nivel 30. Esto hace que durante los niveles iniciales el único modo de enfrentarte a otro jugador es atacar a enemigos con más nivel que están en zonas bastante alejadas.
A medida que avanzas por el juego, los procesos van tomando más y más tiempo, haciendo que por ejemplo entrenar una unidad cueste 10 minutos (o más) lo que limita en gran medida lo que puedes hacer en el juego. Solo puedes construir un edificio a la vez a menos que contrates a más ingenieros usando moneda premium del juego, que podremos usar para mejorar edificios existentes o construir más de un edificio de forma simultánea. Otro aspecto que tarda muchísimo en completarse son los combates, ya que desde que envías tus tropas a luchar hasta que vuelve pueden tranquilamente pasar horas, en las que no puedes hacer mucho más en el juego.
Formar un ejército ofensivo es algo relativamente fácil, ya que puedes reclutar un ejército entrenando tropas o consiguiéndolas en las misiones PvE de búsqueda y destrucción en las que asaltaremos bases controladas por la IA. Por otro lado formar un ejército defensivo es bastante más complicado, especialmente a la hora de construir edificios defensivos, ya que solo lo podremos hacer gastando diamantes. El problema es que las tropas ofensivas no sirven para defender, lo cual hace que atacar y derrotar a otros jugadores sea muy fácil, del mismo que lo es que otros jugadores te derroten, a menos que decidas gastar dinero real para tener unas defensas decentes.
Ahora hablaremos del árbol tecnológico del juego, o también conocido como Contratos; para conseguir desbloquear nuevos contratos necesitamos conseguir unas referencias, que se consiguen aleatoriamente al comienzo de cada día, y cada contrato necesita distintas referencias. Los jugadores pueden cambiar sus referencias entre ellos, lo que invita a que cooperar para progresar; aun así este proceso es muy lento, y los jugadores que escogen pagar para conseguir estas referencias tienen bastante ventaja que los jugadores que no lo hacen.
Siendo realistas lo que hacemos en el juego es lo mismo todo el rato, ya tengamos que atacar a la IA o a otros jugadores; el proceso es siempre el mismo: escoger objetivo, seleccionar tropas y enviarlas a combatir. El juego también invita a que nos unamos a gremios, a formar alianzas y a conseguir amigos con los que comerciar con recursos, tropas, contratos y que nos proporcionen ventajas o ayudas, pero dado a que no hay servidores regionales las posibilidades de tener cerca jugadores con tu mismo idioma (a menos que hables inglés) es bastante pequeña.
Si comparamos juego con Total Domination, ambos son esencialmente el mismo juego con un aspecto y un trasfondo distintos. Esto no es exactamente malo, ya que permite que los jugadores puedan escoger las temática que prefiramos, ya sea militar moderna, batallas futuristas contra alienígenas, o medieval como en Stormfall.
En general el juego es bastante tedioso y no permite que podamos jugar con cierta libertad por la linealidad de su progresión, y aunque no ponemos en duda de que hay mucho esfuerzo invertido en el juego, el papel que juegan los diamantes en el juego rompiendo los equilibrios y el estilo de juego repetitivo no hacen que nos gusten en demasiado. El juego además peca en que no ofrece nada nuevo o interesante al género.
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Por: Josep Puig
